Los aumentos internos son los que se hacen dentro de la labor, tanto en filas como en vueltas, o en el último o primer punto de estas.
Sirven para ensanchar el tejido en un punto concreto, crear formas geométricas como rombos, triángulos o círculos, o para dar volumen a un motivo.
👉 Este tipo de aumento es muy usado en cualquier pieza donde necesitemos que el tejido “crezca” hacia los lados o hacia el centro.